Museo Nacional de Artes Visuales

Muzzioli nació en Módena, después de que su familia se mudó de Castelvetro. A la edad de 15 años, comenzó a asistir a la Academia de Bellas Artes de Módena, trabajando con Antonio Simonazzi y Asioli. A la edad de diecisiete años (1871), años más tarde, obtuvo la beca Poletti que le da derecho a cuatro años de residencia en Roma estudiando en la Accademia di San Luca, trabajando primero con el profesor Podesti y luego después de 1874 con el profesor Coghetti. En Roma, pintó a Abraham y Sara en la corte del faraón, un cuadro que envió a Módena.
Poco después, se mudó a Florencia, donde permaneció el resto de su vida. Después de su regreso a Módena, Muzzioli visitó la Exposición de París, y allí cayó bajo la influencia de Sir Lawrence Alma-Tadema, y comenzó a pintar temas de la historia clásica de Grecia y Roma. Pintó Poppea che si fa portare la Testa de Ottavia, que se exhibió en Florencia, 1876. En Turín, en 1880, exhibió un lienzo de La Magdalena, que completó para los hermanos Della Valle de Módena. Sus primeros cuadros importantes fueron En el templo de Baco y Ritos funerarios en Egipto(1881, Exposición de Milán), donde el primero ganó un premio de 1000 liras y fue elogiado por el crítico Cesare Cantù como el más sencillo y equilibrado de la Exposición. El crítico Jarro decía del mismo cuadro: discernimos (aquí) al hombre que sabe encontrar la palabra propia, que dice lo que tiene en la cabeza, sin violencia de palabras, ni turbulencia en la voz. Captura la época, la gente, el medio ambiente, con una verdad, con una evidencia envidiable, (aquí) no hay fantasmagoría, nada de la sofisticada pompa de un escenógrafo.
En la Esposizione de Venecia de 1887 expuso el Sol de septiembre, mientras que en 1888 envió a Bolonia el Funeral de Britannicus. Este último cuadro fue comprado por el signor Lionello Cavalieri de Ferrara, se considera su obra maestra y fue muy elogiado en la Exposición de Bolonia. Otro trabajo de Muzzioli fue Le feste dì Flora.
Desde 1878 hasta su muerte (1894) Muzzioli vivió en Florencia, donde pintó el retablo de la iglesia de Santi Senesio e Teopompo, Castelvetro di Modena. Muzzioli fue nombrado profesor de las Academias de Módena, Florencia y otras ciudades.
Entre los pintores a los que influyó se encontraban Eugenio Zampighi.