Giovanni Battista Piranesi
Restos de los Acueductos Neronianos
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Obras de la Fundación Antonio Mazzotta, expuestas en el Museo Nacional de Artes Visuales. Los textos están en italiano y en español. Presentación de Gianfranco Gacco Bonetti (Director General para la Promoción y la Cooperación Cultural) y de Gabriele Mazzotta (Presidente de la Fundación Antonio Mazzotta). Estudio de Luigi Ficacci, titulado "Roma magnífica en el grabado de Piranesi". Reproducciones de obras: planchas de cobre de la Colección del Istituto Nazionale per la Grafica-Calcografía de Roma, antigüedades romanas y vistas de Roma. Notas biográficas y bibliografía. Milán, 2001. 183 páginas.
12 de Mar, 2001 – 29 de Abr, 2001
El lunes 12 de marzo de 2001, con la presencia del Dr. Carlo Azeglio Ciampi, Presidente de Italia, y del Dr. Jorge Batlle, Presidente de Uruguay, se inauguraró en el Museo Nacional de Artes Visuales del Ministerio de Educación y Cultura, la muestra "Roma Magnífica", con obras de Piranesi, en el marco de la conmemoración de los noventa años de la creación del Museo.
Arquitecto y grabador italiano, Piranesi nació el 4 de octubre de 1720 en Mogliano, próximo a Mestre. Sus primeros veinte años transcurrieron en Venecia donde, del rico y complejo panorama artístico veneciano, adquirió una sólida formación.
Piranesi sacaría luego rendida cuenta de la veduta. Desde principios del siglo se multiplicaron las colecciones de láminas descriptivas, pero la presencia del artista en Venecia a mitad de la década de 1740, coincidió con un punto clave en el desarrollo de este género. Se entiende por veduta la representación fiel del aspecto urbano en el fluir de la vida cotidiana. Jamás un arte de épocas pretéritas ha sido expuesto con tal fuerza de expresión y con tal vida, al menos por lo que a reproducciones se refiere. En estos grabados que saben valerse de los más expresivos medios de que puede disponer el arte del aguafuerte, Piranesi nos habla de la emoción de la Roma imperial.
La serie de Vedute di Roma, 135 estampas, se alargó cerca de 30 años, hasta la muerte de Piranesi, ocurrida el 9 de noviembre de 1778 en Roma, ciudad en la cual se había instalado. Se trata de un excepcional testimonio para calibrar los diversos cambios técnicos y las preocupaciones teóricas producidas a lo largo de su trayectoria. Este conjunto se ha convertido en el más popular y conocido de toda su variada obra. En ellos se recogen los monumentos que son, por sí mismos, pilares sólidos de la iconografía de la ciudad de Roma. Asombra el modo en que capta una vista y su capacidad para esquematizarla a través de un breve boceto, para más tarde desarrollarla sobre la placa de cobre. Con la divulgación de las Vistas de Roma, Piranesi vio afianzar su fama transformando la convencional Veduta de un mero recuerdo topográfico en sugerentes imágenes de gran poder expresivo.
Las aguafuertes son mucho más que láminas de arqueología. Los monumentos y las ruinas han sido vistos y grabados por Piranesi con un amor que devuelve alma a las cosas muertas. Son una evocación. No sólo las resucita, las engrandece.La visión de Piranesi es fundamentalmente barroca, es decir, Piranesi es el hombre de viva expresión pasional que ve la obra de arte, primero y principalmente, como un valor espacial. En las ruinas de las antiguas construcciones de Roma la circunstancia de su desmoronamiento facilita su ordenación dentro del paisaje que las rodea. Piranesi nos las muestra como ahogadas por la vegetación, pobladas de fantasmagoría y, al mismo tiempo, bañadas por el aire y la luz.